“NO TE DEJES PESCAR, PERMITETE DUDAR”

Concepto de ciberdelito:

Son conductas ilegales realizadas por ciberdelincuentes en el ciberespacio a través de dispositivos electrónicos y redes informáticas.

Consiste en estafas, robos de datos personales, de información comercial estratégica, suplantación de identidad, fraudes informáticos, ataques como cyberbulling, grooming, phishing cometidos por ciberdelincuentes que actúan en grupos o trabajan solos[1].

Concepto y etapas del “Phishing”:

 En los tiempos que corren no resulta extraño haber oído terminologías como “Hacking”, “Spyware”, “Malware”, “Grooming”, “Precking”, “Cyberbullying”, o “Phishing”, y aunque estos nombres resulten llamativos por lo novedosos que se oyen, hoy se sabe que los mismos no refieren a otra cosa, sino a las nuevas modalidades delictivas, cometidas a través de la informática. De las múltiples y variadas clases de delitos informáticos que se conocen a la fecha, nos ocuparemos de manera exclusiva y particular en analizar el llamado “PHISHING”. En primer lugar, explicaremos un poco de qué hablamos cuando hablamos de “phishing”. El mismo se encuentra en pleno auge en América Latina, donde representa un área en constante crecimiento.

Técnicas de engaño, desde las más simples hasta las más complejas y creativas, son ejecutadas y modificadas a diario, buscando localizar puntos de ataque que permitan un mayor grado de éxito en las víctimas. Este tipo de actividad, tanto por el incremento de usuarios conectados a internet, así como también por el aumento en la utilización del sistema financiero en línea, brindan cada vez mayor cantidad de potenciales víctimas para los delincuentes informáticos dedicados a la recolección ilegítima de información privada[2].

Resumiendo, para tener un concepto correcto y acabado de la palabra “phishing” diremos, según lo que propone Davara Rodríguez (2002), que esta palabra no se refiere a otra cosa más que “al robo de datos que distintas personas poseen en sus sistemas informáticos” (p.47). Este robo al que se hace mención, puede ser llevado a cabo de las maneras más insólitas e ingeniosas por parte de quienes se ocupan de su comisión, que en muchas ocasiones mejoran y perfeccionan sus técnicas de engaño para conseguir su cometido.

 La mejor arma para no convertirse en una víctima:

  • Ser cuidadoso cuando se suministre información personal o financiera a través de Internet.
  • Nunca responder solicitudes de información personal a través de correos electrónicos. Si se tiene alguna duda, contactar con la entidad que supuestamente ha enviado el mensaje.
  • No accesar a la página del Banco a través de enlaces ubicados en otras páginas o enlaces que reciba en correos.
  • Notificar inmediatamente al banco cualquier sospecha de fraude o robo de cuentas, tarjetas o claves de acceso.
  • Consultar frecuentemente los saldos de las cuentas y los movimientos de las tarjetas de crédito.
  • Evitar ingresar a la página de los banco desde un cybercafé, o lugares públicos.


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INGRESÁ A ESTE LINK PARA DETERMINAR SI UNA PAGINA EN INTERNET PUEDE SER PARTE DE UNA ESTAFA

https://phishingquiz.withgoogle.com/

1 Comentario

  1. este es un comentario de sebastian

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